El café de la luna, de María Dolores García Pastor

Autor: María Dolores García Pastor

Título: El Café de la Luna

Editorial: Alrevés Grupo editorialAl revés

Idioma: Castellano

Año: 2012

Páginas: 141

Categoría: Narrativa universal

Fecha publicación: 01/04/2012

ISBN: 9788415098508

Reseña de Amando Lacueva.

El libro:

El Café de la Luna es la historia de personajes solitarios que arrastran a sus espaldas el peso de un  pasado: una frustración, un deseo incumplido, un sueño roto, o el esplendor que da sentido a la máxima de que cualquier tiempo pasado fue mejor, pero solo para algunos. Donde todos encuentran su espacio y todos tienen cabida. Un lugar donde los personajes delimitan su territorio señalado con cualquier objeto que rezuma nostalgia, y con el que de una manera u otra, se identifican:  La chimenea, un piano, un cuadro, un libro enmarcado, una vieja máquina de escribir, una estantería de libros... Es el lugar de las ilusiones rotas, vidas truncadas que aguardan ser recompuestas. Donde los sueños se elevan hacia la techumbre para ser atrapados por el alma viva del Café, para que éste acompañe las soledades y sentires de quienes buscan refugio en su interior, porque en el Café de la Luna, cohabitan todas las existencias.

Todo gira en derredor de Miranda, la dueña, y del Café de la Luna, María Dolores nos va presentando a los personajes uno a uno, sin miedo a los saltos en el tiempo, porque es una historia a temporal bañada de los recuerdos de todos ellos a los que acompañas de la mano de María Dolores. Empatizarás con ellos y temblarás ante sus miserias apiadándote de las pasadas glorias que son un doloroso recuerdo de algunos personajes. Es la estampa viva de la desnudez humana, pues los muestra con un realismo y una credibilidad que conmueve.

Lugar de esperanza por seguir viviendo en la vorágine de sus vidas descompuestas. La melancolía inunda sus páginas bien narradas, en la que su cuidada prosa hacen la delicia del lector, y donde la escritora nos muestra esa madurez alcanzada, después de este largo silencio al que nos ha sometido desde la publicación de su primera obra:  "El susurro de los árboles"

Es uno de esos libros que huelen a nostalgia, entre la tinta y la celulosa engomada. Algo que su mero tacto, evoca el recuerdo de los sueños inalcanzados en el discurrir por el angosto sendero de la vida donde todos, cargan con lo que soñaron y lo que realmente fueron, pero que no renuncian a su pasado. Quienes  viven su presente con valentía, luchando por obtener ese futuro mejor.

Una obra de bohemios con un profundo anhelo de libertad.

Se lee que es una maravilla. Si no os lo recomendara, ardería en el infierno.

Los Personajes:

Miranda, la camarera y dueña del Café de la Luna 

Don Pablo.... el joven que se fue de su pueblo en busca de su sueño. Un actor enamorado del mar. 

Berenice, la mulata que duerme en una habitación patera. 

Manuela, la vieja gloria que vive en soledad con la compañía de sus recuerdos. 

Libio SanJuan, el escritor del corazón roto, el bohemio de las letras. 

Juan Salas, el lector. 

Demetrio, el florista enamorado de Miranda y pintor en la sombra. 

Bruno Fusa, el músico callejero afinador de pianos, el duende. 

Prometeo  Díez, el escultorcamuflado bajo el mono de un albañil.  

Clara Pascual, la infeliz casada relegada a florero.

Sinopsis:

Una novela en la que afloran con suma delicadeza los sentimientos esenciales del ser humano: la nostalgia, el amor, los sueños, etc. El Café de la Luna se ubica en lo que fue una casa de citas en la antigua Barcino para convertirse en el medievo en una casa señorial donde un tal Monforte, vivió una apasionada historia de amor con su estimada Medea, esposa del propietario de la casa. Ahora, convertido en café por Miranda, la que fue amante de un adinerado señorito de la zona alta de la ciudad del que obtuvo un dinero, tras chantajearle con delatar su infidelidad. Por ese café pasan, para desayunar o tomar un aperitivo, unos cuantos personajes derrotados: Demetrio, el florista de las Ramblas; Libio Sanjuán, el escritor; Berenice, la joven colombiana; Pablo, que abandonó a la familia por el sueño de ser actor; Manuela, a-podada Nela, que fue artista de varietés, y finalmente, Clara, la chica que se siente desgraciada por falta de amor. Con una atmósfera palpable, la autora estructura la narración en nueve relatos, creando el atractivo engaño de aparentar historias independientes cuando en realidad se interrelacionan entre ellas y tienen, además, como nexo común, el Café de la Luna.