Editorial: ENTORNOGRAFICO
Colección: EL TORNOGRAFICO DE POESIA
Edición: GRANADA2013
ISBN: 978-84-941061-9-4
Idioma: Castellano
Formato: Rústica
Materia: Poesíaespañola e hispanoaméricana
Reseña de Francisco Basallote
Desde
el origen de su existencia el hombre ha sentido la llamada misteriosa
de la noche que ha sido fértil campo para la sensibilidad de los
artistas y, especialmente, los poetas que han sentido una irresistible
atracción por el simbolismo y los misterios de la noche. La luna y las
estrellas ejercieron y siguen ejerciendo su influjo sobre todos los
seres, y no sólo los humanos, del planeta. La noche se convirtió pronto
en el escenario para comunicarse con lo irreal, con los dioses, con el
Absoluto; de manera que se la asocia desde nuestros orígenes con el
mejor espacio posible para la creación y como fuente inagotable de
inspiración artística. En la mitologia griega Nix era la diosa
primordial de la noche.
La poesía universal está repleta de su misterio : Desde el misticismo de la Noche oscura de San Juan de la Cruz : “En una noche oscura,/con ansias en amores inflamada,/(¡oh dichosa ventura!)/salí sin ser notada,/estando ya mi casa sosegada.”, al realismo de Goethe: “La noche es la mitad de la vida,/y la mitad mejor.”, pasando por la sensualidad de Breton: “¡Obscena noche, noche de flores, noche de estertores, noche embriagadora, noche apagada cuya mano es una cometa abyecta sujeta por todos los lados con hilos negros, hilos vergonzosos!”, o el romanticismo de Novalis cuyos “ Himnos a la Noche” constituyen una de las obras más hermosas del romanticismo universal, en los que la sombra de la muerte se posa sobre la cotidianidad , los poetas han utilizado sus mejores versos para cantar el misterioso y mágico ámbito de su oscura visión.
La poesía universal está repleta de su misterio : Desde el misticismo de la Noche oscura de San Juan de la Cruz : “En una noche oscura,/con ansias en amores inflamada,/(¡oh dichosa ventura!)/salí sin ser notada,/estando ya mi casa sosegada.”, al realismo de Goethe: “La noche es la mitad de la vida,/y la mitad mejor.”, pasando por la sensualidad de Breton: “¡Obscena noche, noche de flores, noche de estertores, noche embriagadora, noche apagada cuya mano es una cometa abyecta sujeta por todos los lados con hilos negros, hilos vergonzosos!”, o el romanticismo de Novalis cuyos “ Himnos a la Noche” constituyen una de las obras más hermosas del romanticismo universal, en los que la sombra de la muerte se posa sobre la cotidianidad , los poetas han utilizado sus mejores versos para cantar el misterioso y mágico ámbito de su oscura visión.
La
presencia de la luna en el paisaje nocturno ha despertado desde la
Antigüedad multitud de reacciones en el ser humano, llenas de
sentimiento mágico, que han trascendido en la poesía, desde la
antigüedad, su clara presencia ha ido unida a un hálito misterioso que
ha incidido en los poetas con una contundente intensidad. En la poesía
española la presencia del astro nocturno es constante, ya en “La luna es una ausencia, Carolina Coronado diría: “…Y tú, ¿quién eres de la noche errante/aparición que pasas silenciosa,/cruzando los espacios ondulantes/…”, y sin olvidar a Miguel Hernández que se autodefinía como “perito en lunas”, la presencia del astro en la poesía de Federico García Lorca es masiva, no solo en el Romancero Gitano donde “La luna vino a la fragua /con su polisón de nardos./…” sino en toda su obra. Borges escribiría su poema “La luna” a María Kodama: “Hay
tanta soledad en ese oro./ La luna de las noches no es la luna/que vio
el primer Adán. Los largos siglos/de la vigilia humana la han colmado/de
antiguo llanto. Mírala. Es tu espejo.”Y Jaime Sabines nos dirá que: “La
luna se puede tomar a cucharadas/o como una cápsula cada dos horas./ Es
buena como hipnótico y sedante/y también alivia/a los que se han
intoxicado de filosofía/…”
Con motivo de la celebración de “La noche en blanco” en Granada se ha editado esta Antología Poética “La luna en verso” en la que han participado un considerable número de poetas que han tenido como tema “La noche” y/o “La luna”, y de la inmensa pluralidad de voces poéticas ha surgido una magnífica Antología, bajo la Dirección del poeta Francisco Acuyo redactor asimismo del prólogo de la obra, cuya bella portada ha sido ilustrada por María Teresa Martín Vivaldi.
Esta
interesante Antología reúne a la más extensa relación de poetas en
lengua española, según dicen los antólogos y sin busca de ningún record.
Poetas de todas las partes del mundo de lengua española que glosan el
escenario de la noche en un singular marco poético, ofreciendo un
panorama poético tan diverso como rico.
En el prólogo, Francisco Acuyo, dice: “…La
forma de la noche (si hubiera posibilidad de establecerla) sería acaso
el recipiente vacío que contiene todo, aunque, al fin y al cabo, será
una representación más que no deja de establecerse de manera abstracta a
los ojos del no iniciado, por eso para el poeta (para el místico) este
oscuro designio nocturno se ofrece como el sedimento básico para
cualquier índole de ejercicio creativo. Es el basamento mítico desde el
cual, ancestralmente, se establece el lenguaje básico (iniciático)
mediante el que acceder nada menos que a la realidad del fenómeno
creativo, que no deja de ser sino la consolidación y constatación
simbólica de la realidad de ser…”
Y
en realidad así es, del gran seno de la noche, de la esplendorosa
claridad de su astro, la creatividad de los poetas han hecho posible
esta muestra antológica de la poesía de hoy día en castellano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario