Como Agua Para Chocolate, de Laura Esquivel

• Nº de páginas: 216 págs.
• Encuadernación: Tapa blanda bolsillo
• Editoral: DEBOLSILLO
• Lengua: ESPAÑOL
• ISBN: 9788497592314

Reseña de Fran Ortiz

Nunca una lágrima pudo significar tanto. Esta obra está enmarcada en una época difícil para el amor ¿Y cual no lo ha sido? En un lugar privilegiado y una madre autoritaria incapaz de entender los sentimientos de su hija, pues nunca se atrevió a deleitarse de los suyos propios.

    Pedro, nuestro galán,  no se dio por vencido, a pesar de que su solución "in extremis" fue muy dolorosa para Tita, nuestra protagonista. La devoción de este joven caballero acomodado, le empujó a aceptar el casamiento con la hermana de su amada, con la idea de poder estar cerca de Tita.

   Tita rebosaba juventud, voluptuosidad y sobre todo hermosura, estos eran los ingredientes principales de su alquimia. Ligada a la cocina y al cuidado de todo el rancho por obligación materna, esta maravillosa criatura, extiende su amor en cada acto de su vida cotidiana. Cuanto más se empeñaba la madre en bloquear su contacto con Pedro, Tita se las ingeniaba en seguir conquistando su corazón, sin necesidad de contacto físico.  Tal vez ese sea el secreto, la química es el verdadero componente del amor, pero lo que nos hace sentir, nadie puede negar que es auténtico. Quien le pone barreras, comete una aberración muy cruel. Ojalá siempre terminara triunfando este sentimiento por encima de ideologías y religiones, que se apropian del amor de forma pueril con aviesas intenciones, cuando lo más maravilloso de este sentimiento es su insolencia y su cercanía a la verdad. Cuanto más visceral y profundo, mucho mejor. Así nos domina como el fuego y nos impulsa a cometer actos deliciosos que nos hacen sentir vivos y nos alejan del temor a las posibles consecuencias. Tal vez por ello siempre nos toma desprevenidos, en momento incierto y lo consideramos inoportuno e inapropiado (por la presión social). Que absurdo. "pobres e infelices mortales somos". Cuan afortunados aquellos que atienden más a su corazón que a la frialdad de sus cerebros. El Egipto faraónico e imperial, nos superaba por completo en ese sentido. El erotismo y la sensualidad de su espiritualidad eran su leitmotiv. Es por ello que su grandeza milenaria nos sigue seduciendo hasta nuestros días.

    La experimentada escritora mexicana Laura Esquivel, latiniza estos principios, su literatura es prosaica y cercana al mismo tiempo. Escribió esta historia en el año 1989. En ella nos invita a vivir y a soñar, entre recetas de cocina, con un realismo inusitado, narrada en la frontera entre la magia y el realismo, envuelta en los albores de la revolución mexicana, a principios del siglo XX, nos resulta conmovedora. Con un joven Pancho Villa de por medio, liderando a los rebeldes contra el dominio extranjero e interrelacionando en cierta medida con los protagonistas del relato. Un argumento que no nos dejará indiferentes.

    Tanto si aun no han tenido la suerte de vivir una experiencia de amor auténtica, como si tienen el privilegio de estar viviéndola en estos momentos, o si tal vez si dejaron escapar momentáneamente la oportunidad de atender los designios de su corazón, en esta novela sacarán razones suficientes para sentirse identificados y reflexionar sobre lo que están sintiendo.

   Lo mejor de todo os espera en el final, como así lo demandan las buenas historias, si quieren descubrirlo, sí aun creen en los milagros, búsquenlos entre sus páginas.