La cuestión 106, de Macarena Márquez

La nueva novela de Macarena Márquez, gira en torno al Velázquez de Orihuela: La Tentación de Santo Tomás.

El Velázquez de Orihuela, La Tentación de Santo Tomás, es el tema central de la nueva novela de Macarena Márquez. La historiadora madrileña, que el año pasado publicó la biografía de la reina Bárbara de Braganza, discípula del gran Domenico Scarlatti, trama en esta ocasión una novela de intriga sin precedentes alrededor del famoso lienzo de Velázquez.

La irresistible atracción que los rostros del cuadro ejercen sobre Julia Conde, conductora de uno de los programas radiofónicos de mayor audiencia del país, acaban arrastrándola hacia un profundo estudio del lienzo. En la base de su fascinación anidan los secretos de un enigma, cuyo desciframiento desvelará una compleja red de relaciones humanas entre quienes creen ser meros compañeros de trabajo, cinco personas que trabajan en unos famosos grandes almacenes y que, a su vez, viven en un edificio del centro de la ciudad.

La historiadora y pintora madrileña, especialista en Historia del Arte por la Universidad Complutense, afirma que, al ver por primera vez el cuadro, que se encuentra en el Museo Diocesano de Orihuela, ella misma –al igual que una de las protagonistas de su novela- se quedó prendada de los rostros centrales del mismo. A partir de ahí, investigó sobre el lienzo hasta gestar esta novela, con la que afirma querer llegar hasta el centro mismo del hombre contemporáneo, al que retrata en todos sus registros.

Por hacer una incursión a un nivel muy profundo en el pensamiento y la psicología de la sociedad de nuestros días, La Cuestión 106, publicada por la Editorial  Sepha, va dirigida a ese hombre que trabaja, que ama, que odia, que se relaciona, que envidia, que vive en comunidades de vecinos, que habla por teléfono hasta dormido,  que escribe correos de forma compulsiva, que cuenta con neveras de última generación totalmente vacías, que tiene ocios y negocios, que no dispone de tiempo alguno, al que le da igual lo que haga su vecino, que corre, que vuela, que ha cambiado la bañera por platos de ducha rápida, que se alimenta de comida rápida, que deglute información de forma rápida, que se desenvuelve de forma rápida, que vive en la incertidumbre del sustento, pero que no por todo ello ha dejado de pensar.

La Cuestión 106 se presenta a los medios el Jueves 15 de Noviembre en Madrid a las 19:30 en el Centro Riojano de Madrid. Calle Serrano 25

Presenta la novela Pepa Gea – Periodista radiofónica – Subdirectora de Madrid en la Onda

INFORMACIÓN SOBRE LA CUESTIÓN 106

Sinopsis

La irresistible atracción que los rostros del cuadro ejercen sobre Julia Conde, conductora de uno de los programas radiofónicos de mayor audiencia del país, acaban arrastrándola hacia un profundo estudio del lienzo. En la base de su fascinación anidan los secretos de un enigma, cuyo desciframiento desvelará una compleja red de relaciones humanas entre quienes creen ser meros compañeros de trabajo, cinco personas que trabajan en unos famosos grandes almacenes y que, a su vez, viven en un edificio del centro de la ciudad.

¿Qué es La Cuestión 106?

La cuestión 106 es un canto a la luz que proporciona el conocimiento profundo de las cosas. Un abismo de sabiduría. Un cuadro de Velázquez. La historia de un adulterio. Otra dimensión.

Y también es un programa de radio. Un mecenas. Relaciones laborales intrincadas. Vecindad en el centro de la urbe. Grandes superficies. Ambiciones. Un tímpano gótico de cuatro registros. Casados. Solteros. Líos. El olor de una madre.

Es un rompecabezas virtual. Un paquete que no acaba de llegar nunca. Una obra de conocimiento. Un adolescente sensible. Normalidad y trasgresión de la mano. Amor. Envidia. Infidelidad. Un christma corporativo. Ascensores que no paran. Empleados. Directivos. Objetivos. Cigarrillos. Broncas. Trabajo.

Sin olvidar que es un enigma. Un blog.  Muchos aromas. Conexiones internáuticas. Una novela en proceso de escritura. Una gata siamesa. Inteligencia a través de las ondas. Una obsesión.

Y una empresa. Cerveza. Una cifra. Sensaciones. Arrobos. Carteles desvaídos. Interlocutores inteligentes.  Misantropía. Yogures caducados. Coitos sobre losetas de gres. Filosofía en estado puro. Un ciclo iconográfico. Teoría del arte.

Es una cuestión y es composición en aspa. La cruz de San Andrés. Un frasco de perfume dando vueltas. Iconos. Un andamio turístico. Una boca.

Y un juego. El cielo. El infierno. Coros angélicos. Embelesos. Recelos. Historiadores. Doctores. Simbología. Neveras vacías. Contemplación.

La cuestión 106 es la luz que emite una lamparita de color escarlata. Un ángel camuflado. Un amante. Un amigo. Un colegio. Un jefe. El mejor detective de la ciudad. Color violeta inundando la atmósfera. Algún sueño que se cumple. Preguntas que se quedan en el aire. Regaliz. Una flor que crece sola.

Otros datos sobre La Cuestión 106

Inserta en lo que aparentemente no es más que una relación convencional entre vecinos, que a su vez son compañeros de trabajo, quienes además de compartir ascensor y recibos de comunidad, viven muy próximos al lugar en donde trabajan, subyace una compleja red de relaciones humanas entre compañeros de trabajo y jefes, amantes y  amigos, familiares e interlocutores virtuales que progresivamente, a la luz de una máxima de filosofía medieval que subyace a lo largo de toda la obra, irán desentrañando sus puntos de unión y también sus divergencias.

Desde una perspectiva contemporánea, la locutora de una emisora de radio corporativa, una escritora que a la vez es dependienta de unos grandes almacenes, un ex empleado dedicado a sacar adelante a sus hijos, un director comercial y una empleada que acaba de ser víctima de un expediente de regulación de empleo, comienzan a tirar del hilo de su historia hasta comprobar cómo están intrínsecamente relacionados en el tiempo, a través de sus antepasados. Entre los cinco protagonistas se entrecruza un internauta que sólo tiene voz virtual.

Los puntos de conexión entre todos ellos son: un edificio de ocho plantas, un ascensor, unos grandes almacenes, una emisora de radio, y la red internáutica.

Por encima de este panorama planea un cuadro de Velázquez, un tímpano gótico de cuatro registros en fase de decodificación y un paquete que no acaba de llegar nunca.

Una máxima de filosofía escolástica subyace y aflora como un leit motiv a lo largo de toda la obra. El desciframiento de la misma, al mismo tiempo que va proyectando luz sobre la esencia e historia de los protagonistas, va desvelando ante el lector -ante los personajes mismos-, arcanos filosóficos, incógnitas que, cuando nosotros -como espectadores- y ellos -como protagonistas-, creemos haber desvelado definitivamente, nos resitúan en el punto de partida de este entramado que nos irá atrapando como una tela de araña y que mezcla, de forma peculiar, el mundo del conocimiento con el del consumo y la filosofía del medievo con la del hombre actual.

La cuestión 106 tiene como paisaje de fondo dos escenarios únicos: un edificio en el centro de la ciudad y unos grandes almacenes muy próximos a dicho edificio, en donde trabajan sus protagonistas.

La publicidad de la que se habla en la novela está en la base de las corrientes marketinianas más punteras del momento: el retail media. El retail media es un medio publicitario muy novedoso que consiste en emitir mensajes de audio, o de vídeo, dirigidos al público que en ese momento está comprando en supermercados o grandes almacenes. En Roche Maltés, se puede escuchar al tiempo que se compra, se mira, se toca o se consume. La estrella es un programa de radio de la emisora del emporio, que se emite por megafonía. En la novela, la conductora del programa, una excelente comunicadora, creativa, carismática y original, cuya única obsesión es restaurar un cuadro de Velázquez, es capaz de venderlo todo. Cada vez que habla levanta la cifra de negocio de su empresa un 32% promediado.