martes, 8 de marzo de 2011

El Sol, el sexo, la sangre y el tiempo, de Alejandro Colliard

Autor: Alejandro Colliard

Título: El Sol, el sexo, la sangre y el tiempo
ISBN: 978-987-33-052-7
Año 2011
Formato electrónico

Reseña de Raúl Cardillo

“Mar del Plata no esta en paz". Nada ni nadie lo estará hasta el fin del relato.
Si bien la ciudad desaparece como tragada por su mar ceniciento o devorada por una progenie gris y bastarda, mutando en cualquier otra aglutinante de soledades.
"Todo lleva hacia adentro" y es lo que haremos de la mano de Alejandro Colliard como psicopompo hacia el interior mas oscuro y terminal de Alicia.
Una Alicia que no es Alice y su hongo mágico en la conejera. Tampoco será Lucy LSD. Sus diamantes serán duros pero carecientes de brillo.
Este viaje será nocturno y gris de lluvia, sin retorno. Aunque el sol se haga valer al final a través de una prismática ventana.
El artista y escritor Alejandro Colliard, nos ofrece su segunda novela:"El Sol, El Sexo, La Sangre y el Tiempo después de la festejada "Aguante Barreda", solo que aquí ya no hay farsa, escasea el humor y si lo hay será negrísimo.
Colliard esgrime un lenguaje que lo aproxima al neo barroso. Una forma y poética que distancian de la crudeza de lo narrado. Barroco latinoamericano escrito con barro rioplatense (Mar del Plata no esta a salvo de ríos oscuros)
Renueva el género de terror contando una historia que podría ser demasiado común. Una prostituta, sus extravagantes clientes, el sexo como imposible soledad o mueca grotesca. Cocaína, la sustancia de la ambición de muerte y el individualismo... De pronto todo cambia, la sangre corre y se vierte ominosa y deseada.
No es SIDA, que supo generar solidaridades en el mundo. Se transmite por y a causa de la sangre... de la mordida. Estamos de lleno en el mito del vampiro, emblema por excelencia de la soledad egocéntrica.
Lejos del héroe romántico o de las modas livianas y adolescentes, el vampirismo en Colliard es sucio obsceno. La monstruosidad es manifiesta en los cuerpos. Remite al horror del amante de "Una mujer poseída" vieja pelicula de Andrei Zuslazky, y al repulsivo Nosferatu de Murnau.
Todo proseguirá hasta un final clásico, en una pesadilla sin aliento como un buen filme de terror.
¿Que podría ser terrorífico en este país de horrores, con monstruos-torturadores exhibiendo su senilidad en la tele?¿Con Barredas?
Tal vez la moneda falsa de la coca, del sexo fingido que encubren otro genocidio soterrado.
El abismo al que nos asomamos en plena nausea.
Entre otras cosas nos salva el amor, la solidaridad, el arte. La buena literatura como el caso de la nueva novela de Alejandro Colliard: El SOL, EL SEXO, LA SANGRE Y EL TIEMPO.

Raúl Cardillo

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